My name is Byron

25 cirugías se rifó Byron Widner para borrar su pasado escrito al calor de varias pedas cuando era el mero mero de uno de los movimientos de odio más cabras. Era líder de una bandota de skinheads.
Algo he aprendido con el paso del tiempo y es que cuando uno va creciendo puede estar una de dos, o más emputado o menos emputado.
Optar por la segunda te hace ver menos looser y sobretodo menos forever ya que si no eres el Waltz el wey de Bastardos sin gloria o de menos el de American History X, pues en realidad serías un ruco racista nomás.
Pus este wey como el de American History X, algo le entro en algún lado de la cabeza o alguna cabeza le entro con algo por algún lado y decidió dejarse de mamadas y redimirse.
Volverse anti-el mismo. Uno de los actos más punks y respetables a mi parecer. Hace que dejar de fumar sean pajas de chimpo a comparación de la sola idea de ser lo contrario upa ti y lo que crees así de webotes.
Dejó su fascista ideología y sus mensajes racistas y de supremacía blanca que forraban su cuerpo o al menos su cara.
Aunque bueno, si te rayas la cara, seguro un día te arrepientes, ya ven al famoso zombie man, ahora anuncia cremas que tapan tattoos.
Pus total que el wey recuperó su propio cuerpo de las manos de la suástica a quién se lo había ofrecido hace años…
Peeeeeeero… remover tanto odio en tinta negra es difícil y ni fabuloso, ni maestro limpio. Aunque este wey estaba tan convencido de la idea que estaba dispuesto hasta a joderse la cara en ácido, osea no drogarse si no desfigurar la piel para no ver las imágenes haters de sus tatuajes.

Y pues 25 cirugías removedoras de pendejadas malignas y neonazis cuestan sólo 32mil dólares.

El wey ya tenía una mujer, familia hijas y un prominente futuro como ex – maligno así que en su desesperación y al descubrir que no sólo no tenía seguro médico si no que borrar tatuajes no es una cláusula muy común. Obvio, si la cagas tu. ¿Porqué habría de pagarte AXXA?

Su esposa se armó de tanates y se dio a la tarea de recuperar la cara de su wey, así que haciendo una de las cosas que hacen mejor los gringos además de los hochos Natan´s, le pidió ayuda a una fundación. La de Daryle Lamont Jenkins. Dónde un afroamericano, los de la raza que este wey odiaba, encabeza el movimiento anti odio en Filadelfia y se llama “One People´s Proyect” y así consiguió gorrear las 25 operaciones con una “donación de 35 mil dólares pa sus cirugías.

Y así es, señoras y señores como un lacra de la sociedad, se tira a una nalguita, se casa, tiene dos hijas y consigue volverse en un ejemplo a seguir para los niños de la colonia después de haber sido el terror de los morenos de su distrito y lugares aledaños.

Yo me pregunto.

Si una fundación le “dona” un chingo de dinero a la gente para dejar de ser culero, entonces conviene ser culero ¿no?
Total, luego dices, que cambiaste y regresas a ser el mismo ñoño que eras antes, sólo que ahora eres popular y El Satan® bloggea sobre ti.